17 abril 2013

EN PLENA PRIMAVERA


¡Pero si es que el tiempo es muy corto! La última entrada referida a la proximidad del hornazo ya quedó atrás. Los proyectos de la Peña para esos días cumplidos a plena satisfacción (concurrida primera asamblea, actividades para las fiestas, primeros ensayos del himno,… a saber:
 - No hay foto de la reunión porque ésta se repite. -Mismo escenario, mismos asistentes, un año mayores- y (algunas ausencias)
- La presentación del himno por parte de los autores, muy lograda, si bien de entrada no levantó pasiones, se debe a que nunca una buena canción te engancha a la primera. Y otra circunstancia es la frialdad que nos caracteriza a la gente de por aquí, para arrancar un aplauso.
-A una segunda interpretación a la que se unió otro valiente e inquieto socio, ya produjo muy diferente sensación de agrado y aprobación.
Cuando el que suscribe la escuchó por primera vez, dijo que muy bien, a la segunda se permitió tararearla en voz alta siguiendo la estela de los autores, concluyendo al final que muy bien y que resultaba pegadiza, con lo que ya empezamos a plantearnos actuaciones en los pueblos cercanos, luego grabaríamos  un disco y cuando fuéramos superventas vendrían a contratarnos las televisiones. (Esto le pasó a la lechera, pero ella no tuvo nuestra moral de éxito y se quedo a medio camino).
En otro orden, la meteorología os ofreció paisajes inundados, ya relatados inteligentemente por quien tiene gran facilidad para la redacción, acompañados gráficamente y sobradamente comentados. También Manolo (el de la página) ha puesto o enlazado, abundante información de fotos y vídeo. Es una lástima que no vivierais los días primaverales que ahora nos toca disfrutar, donde pasear por el campo y dirigir la mirada en cualquier dirección es una bendición porque descansa la vista posándose en cualquier lugar que ha sido regado por las lluvias y ahora comienza a explotar de colorido primaveral.
También ahora llega el día de San Marcos que, tan entrañables recuerdos de niñez y adolescencia nos trae a los de cierta edad, por la excursión de chiquillería que hacíamos al pueblo de Cerezal. Parecía una peregrinación. Si se consideraría importante la fecha, que hasta se suspendía la clase de tarde ese día.