18 mayo 2015

PROBLEMAS CON LA TDT

También a los lagartos en ratos de ocio, o cuando termina la actividad diurna, al oscurecer-noche nos agrada ver TV, y escuchar la radio para recibir información plural de los medios que emiten en abierto a través de la TDT.
Este rincón oeste de nuestra provincia y, al menos en este nuestro pueblo, sin que nadie de explicaciones dejan de verse cadenas de TV y oírse emisoras de radio que habitualmente están emitiendo por la TDT.
A principios de la semana pasada se veían aquí las mismas televisiones que en Salamanca. De repente han desaparecido la mitad, y que nadie diga que hay que volver a sintonizar de nuevo porque esto ya está hecho hasta el aburrimiento.
Mi casa está en el mismo sitio, mi TV es la misma, mi antena no se ha movido y las frecuencias no llegan.
Un motivo que podía justificar la ausencia de señal son averías que producen las tormentas frecuentes en esta temporada, pero hace mucho tiempo que no se da este meteoro.
Parece que el pueblo está condenado a beneficiarse de este servicio solo de manera intermitente y no terminamos de oír la  radio y ver TV con seguridad y garantía de continuidad.
Esto no es normal, y si esto ocurre durante una campaña electoral donde todos los políticos prometen que vamos a ser más guapos, más ricos, más felices y que vamos a comer muchas perdices,  que será cuando termine y olviden las promesas que hicieron.
Desde este humilde rincón bloguero, me permito denunciar tal situación  por si pudiera producir  eco y llegar a quien corresponda solucionarlo.

La nueva corporación municipal que salga el próximo día 24 tiene aquí motivo de reivindicación para hacerse notar ante la empresa que gestiona este servicio.
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Esta noticia también en Viva mi pueblo de La Gaceta 

14 mayo 2015

UN DIA ESPECIAL

No se como podría describirse con fidelidad la transformación de un día normal y rutinario en especial, de los que su recuerdo perdura en el tiempo y en el mejor de los casos no se olvida nunca.
Como es normal los lagartos disfrutan a diario de los beneficios climatológicos que estos días primaverales ofrece el campo, y así ocurría el día de hoy cuando éste, durante su paseo matinal,  tuvo un encuentro y conversación divagante sobre las bondades, colores, olores y sonidos del campo.
Al tiempo de la despedida me transmite que hoy 14 de mayo es el día de la “Santa de Pereña” (con esta denominación conocemos en el pueblo tal aniversario), y que piensa asistir con su familia a la romería, incluida promesa de cubrir a pie los 5 kilómetros que separan la ermita del pueblo de Pereña.
Ni el pensamiento mas remoto me hubiera llevado a primera hora del día plantear tal excursión, pero influido por los ánimos de mi compañera de paseo en la despedida, y valorando lo largos que son los días en esta temporada, me animó a preparar el viaje con la esperanza de alcanzar y coincidir con el grupo de andarines que iban a ofrecer su esfuerzo a la Virgen en cumplimiento de su promesa.
La tardanza en tomar decisión retrasó mi llegada y coincidimos ya en el centro religioso donde había que situarse con antelación dada la afluencia de asistentes que resultaba imposible para acoger la masa de peregrinos.
Aún faltaba para comienzo y no parecía la espera de una ceremonia religiosa, pues saludos de peregrinos que coincidían, felicitaciones, conversaciones entre grupos formaban murmullo festivo.
En esta espera, mi amiga me comunica que al finalizar la misa comeremos todos juntos y que no puedo excusarme porque ya ha previsto silla, plato y vaso para mi.
Con la ermita rebosando de asistentes por  los alrededores, comienza el acto religioso y los celebrantes agradecen la asistencia y dan la bienvenida a los peregrinos que según parece asisten también desde Portugal. Pues uno de los sacerdotes era portugués y en este idioma oficia. El silencio y la devoción habían envuelto el interior y a pesar de la masificación la ceremonia resulta íntima y acogedora.
Al finalizar se destina el tiempo a saludar y conversar con otros vecinos que también han acudido, a visitar los puestos de venta y participar de las actuaciones musicales. También a admirar el impresionante paisaje que rodea este lugar, que a uno le recuerda la impresión causada en primeras visitas de su niñez cuando por primera vez nos llevaron nuestros padres a este lugar.
Desde allí se divisa el paso del rio Duero que transcurre al fondo del cañón y uno de los chiquillos de aquellos tiempos infantiles presumía de haber bajado hasta la orilla del rio.
Preguntado yo a mi padre si eso era posible me respondió: “eso es mentira. No habría regresado ni al toque de la oración” (el toque de oración se daba en el pueblo todos los días a la hora del oscurecer)

Desde el final del paseo matinal, el día  tenía un cambio de destino mucho más feliz que cualquier día normal.

Como no se me ocurre otra cosa, utilizo esta entrada como agradecimiento a Rosa, que desborda generosidad y gracias a ella he podido compartir también con su familia no solo la mesa, sino también el convite de los mayordomos, las actuaciones, y la sobremesa que ha sido de los más inolvidable en compañía de Nicolas (el de Masueco) que durante largo rato nos hecho llorar de risa con un caudal interminable de recitales, canciones y chascarrillos con su genuino carácter y risa continua.